No es una cuestión de añoranza, sino de tratar de poner en valor los valores de algunos empresarios del comercio que, tras una vida entregada a su vocación de servicio al cliente, han decidido, merecidamente, jubilarse y echar el cierre a su establecimiento.
En «La Tiendología» hablamos constantemente de como debemos fijarnos en la experiencia de quien nos precede para aprender de sus éxitos, evitar errores, dignificar la profesión, y resaltar nuestro orgullo como emprendedores y empresarios del comercio.
En este artículo quisiera resaltar la figura de un buen amigo que ha decidido con gran dignidad que ha llegado el momento de cambiar de actividad, jubilarse, y cerrar su negocio.
Una palabra que define perfectamente a José María Peral es COMPROMISO. Lo he podido comprobar desde que lo conozco, y a lo largo de estas casi dos décadas de amistad.
Compromiso con su familia y con el negocio que heredo de sus antepasados que lo iniciaron todavía a finales del siglo XIX, y del que tomo el nombre de «Tejidos Castaño» por su abuelo.
Compromiso con sus compañeros de profesión del sector del comercio textil de Elche, siendo Presidente fundador de la Asociación de comerciantes textiles de Elche hasta el momento de su disolución este mismo año.
Compromiso con el comercio urbano, participando activamente en el movimiento asociativo de la provincia de Alicante, y en especial del de Elche.
Compromiso con sus amigos, con sus clientes y con sus convicciones religiosas.
Entrar en Tejidos Castaños era toda una experiencia de vuelta al pasado.
Me costo entender como una persona tan innovadora en el fondo, resultaba tan tradicional en las formas.
Conociéndolo comprendí que en su voluntad estuviese siempre mantener y conservar su tienda tal y como la recibió de sus antepasados.
Para mi recuerdo queda el suelo hidráulico de la tienda , sus portalones de madera y como no, su mostrador y sus estanterías de madera americana.
Ese reloj antiguo que funciona perfectamente , y su máquina registradora «National» del que yo, como muchos, nos enamoramos e intentamos comprarsela sin éxito.
El pasado día 1 de Abril tejidos Castaño cerró definitivamente sus portalones de madera. Tras ellos queda una parte importantísima de la vida de mi buen amigo, pero también del patrimonio de la ciudad y del comercio.
Debemos sentirnos orgullosos de tu labor y felices de seguir viéndote con ganas de trabajar en tu proyecto de vida personal.
¡Felicidades José María!